Transhumanismo

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Transhumanismo ¿inevitable?
Tumbaco, al borde del mes de Noviembre de 2021.

“El Big Data, la Bio-Fármaco-Genética, el Internet del Todo, la Inteligencia Artificial y la Realidad Extendida nos cambiarán por completo. Seremos en muy breve TransHumanos y más allá de la Singularidad Tecnológica, posiblemente PostHumanos.
Manifiesto Posthumanista.

Sí, luce inevitable que daremos un salto cuántico impresionante hacia una versión modificada de quienes hemos sido hasta ahora… Seres resistentes a aceptar, tolerar y convivir con la idea de que los avances en la extensión de nuestros sentidos y capacidades de modificar fuertemente la realidad externa, res extensa para filósofos, han avanzado a un punto sin retorno.

Algunos pesimistas-optimistas frente a los riesgos que acarrea, han dicho que la única manera de detener este viaje a la hibridación persona-tecnología sería con una conflagración mundial, donde se empleen recursos destructivos tan poderosos que darían razón a la afirmación de Albert Einstein cuando le preguntaron cómo sería la tercera guerra mundial: “no tengo idea de cómo será la tercera guerra, mas estoy seguro de que la cuarta será con piedras y palos.”

Puestas así las cosas, y entendiendo que, al menos yo, elijo la hibridación antes que la guerra, pensemos un rato acerca de lo que implica para nuestras vidas cotidianas el hecho de que cada vez más nuestro matrimonio con los vehículos tecnológicos que nos vinculan con el vivir, se estrecha grandemente.

Personajes como Moon Rivas, Neil Harbisson, Rob Spence o Chris Dancy constituyen una vanguardia que ha asumido esta inevitablilidad existencial y están trabajando arduamente para que el resto de los humanos, entendamos, comprendamos y asumamos las ventajas de tal avance en el desempeño por la vida. Tal como señaló Dancy para la prensa: «Todo comenzó en 2007. Me sentía muy infeliz.

Estaba a punto de cumplir 40 años y tenía una carrera a mis espaldas creando sistemas informáticos para empresas de software. Entonces, me pregunté si sería posible usar esas habilidades para mejorar mi propia salud», comentó a la BBC. Y agregó: «Solía molestarme que me vieran como un robot. Pero ya no espero eso porque ahora todo el mundo anda conectado a smartphones, relojes inteligentes y todo tipo de wearables”.

Para colocar la guinda a la torta, Mark Zuckerberg ha puesto en manos del público la estrategia que las grandes corporaciones tienen trazada, para que sigamos en un mundo movido por las estructuras de poder que se van configurando en cada época, y hacia donde dirigirán los próximos tiros en esta avanzada sin precedentes en la evolución humana.

RECOMENDADO:
Michio Kaku: El futuro de nuestra mente, Penguin- Random House, 2014.
Yuval Harari: Homo Deus, Debate, 2017.