PSIQUIATRA VERSUS PSICÓLOGO

«La enfermedad es el producto tardío de una serie de decisiones equivocadas»

El psiquiatra es el nuevo médico de cabecera. La razón de esto es que se ha comprobado que la mayoría de las enfermedades tienen sus raíces en causas psicológicas. Adicionalmente un psiquiatra es capaz de recomendar al especialista más adecuado.

Anteriormente, el estrés era una enfermedad que los científicos no lograban ubicar en una rama médica. Hoy en día se sabe que el estrés es el punto de arranque de cualquier enfermedad. En la mayoría de los casos las personas acuden a diferentes especialidades médicas para tratar un síntoma que esté presentando: gastroenterólogo, cardiólogo, otorrino, entre otros. Cuando son examinados se dan cuenta que físicamente no existe ningún problema en el organismo pero que, en cambio, todo proviene de un problema de estrés.

Es por esta razón que cada vez más se estila que los médicos psiquiatras se conviertan en médicos de cabecera.

Formar un psiquiatra hoy en día requiere de 100.000 horas de estudio, sin contar las horas de práctica. Un psiquiatra debe conocer de comunicación humana, gestión de emociones y desarrollo de pensamientos. Esto permite que se aborden los problemas de forma natural antes de optar por el uso de medicamentos.

Hoy en día la sociedad está plagada de coaches de vida, consejeros y demás. Estos podrían ser buenos consejeros o buenos acompañantes como ocurre en los grupos de autoayuda. Sin embargo no logran hacer una labor psicológica completa. Los estudios demuestran que las personas que van a estos especialistas sin licencia, los pacientes tienden a sentirse mejor, sin embargo al hacer un análisis más profundo, estos pacientes tienden a valerse de una ilusión o el autoengaño para aliviar sus pesares.

Hay muchas escuelas de psiquiatría que se han quedado atrás y solo toman en cuenta al cerebro desde el punto de vista biológico. El deber ser es que trate la parte psicológica, es decir del comportamiento humano.

La tristeza es una respuesta que se da a una pérdida y este proceso lleva a la reflexión, lo cual lleva a la nostalgia y por último a la felicidad. Por otro lado, la depresión es un comportamiento que no lleva a la reflexión sino que se convierte en un círculo vicioso en el que la persona se hunde cada vez más.

En casi todos los países del mundo occidental existen crisis en los servicios de salud. Esto tiene que ver con el aumento de la demanda y por otro lado la burocracia que involucra al sistema médico que impiden que se actualicen de acuerdo a las circunstancias que atraviesa una sociedad.